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miércoles, 1 de octubre de 2008

operación alba podría denominarse el terrorismo de estado del indígena morales. el mundo nos da las pautas.

me patearon tanto...que originaba sangre (mujer policía víctima de la violencia militar)

Durante la UDP (Unidad Democrática y Popular) en 1983 una noche en las calles del país apareció una inscripción que decía: "Banzer Vuelve" para los que se beneficiaron de los favores de la dictadura significaba una vuelta al poder, pero muchos bolivianos quedaron prácticamente petrificados solo con leer esa frase pues los trasladaba al septenio del terror donde hombres y mujeres sufrieron el rigor de las ejecuciones sumariales, de las desapariciones, de las torturas, de los secuestros, del exilio que fue el fin de cientos de familias, de padres que se miraron alejados de los hijos e hijos que hasta hoy siguen alejados del país o simplemente son los que engrosan las listas de los desaparecidos, fue la época donde no existía ningún tipo de derechos o libertades del individuo, su vivienda podía ser violada a cualquier hora en busca del jefe del hogar, la sola sospecha de que uno pensara diferente a los postulados de las dictaduras era suficiente para ser secuestrado y confinado, la fuga a un país vecino no era solución ya que en esa época funcionaba la "operación Cóndor" una especie del "alba" pero de la represión donde los policías de dichos países hacían el trabajo sucio, solo basta ver como asesinaron a Torres, los brazos de la dictadura llegaban a los bulevares Franceses donde Zenteno Anaya acabó con una ráfaga de metralleta, eso significaba "Banzer vuelve" para muchos bolivianos.
Banzer murió y a pesar del esfuerzo de este por integrarse a la democracia su estigma lo persigue. Hoy, a más de seis años de la muerte del Dictador, la sombra del terror llegó de la mano del populismo que propugna Evo Morales, solo basta hacer una retrospectiva de los últimos 20 días y veremos que no falta nada para señalar que: " Evo Llegó", y llegó vestido de traje de campaña, llegó al aeropuerto de Cobija y sin terminar de bajar del avión disparó contra un pastor evangélico, militarizó un departamento completo, detuvo o mejor dicho secuestró a una autoridad elegida democráticamente y de paso ratificado por un referéndum, se le violaron todos sus derechos fundamentales sin investigación, sin proceso, sin acusación formal, sin orden de encarcelamiento lo encerraron en la cárcel pública de San Pedro.
Más tarde se secuestró y se confinó a personas sin proceso alguno, el testimonio de una mujer policía que fue torturada hasta orinar sangre es el ejemplo de que se vive en un momento de violencia de estado, la imaginación fértil que los ciudadanos que se refugiaron en el Brasil son perseguidos por brigadas que pretenden secuestrarlos en un país extraño, esto se repite en Santa Cruz donde de manera rara la policía realiza operaciones de secuestro contra sospechosos de haber pateado a un jefe policial, vagonetas con vidrios polarizados secuestran a dirigentes cívicos en Villamontes, entonces la pregunta es ¿cuando vendrán por nosotros?, nadie está libre ahora de que le violen sus derechos, ¿que pasó?, la democracia no requiere de estas practicas y Banzer ya no está para responsabilizarlo.
Hoy podemos decir que en este país del cambio el indígena Presidente permite la violación de los derechos humanos y fundamentales de las personas como la legitima defensa, si a eso sumamos la persecución a la prensa, el acoso permanente, la muerte civil que se hace contra autoridades en campañas mediáticas con dinero del estado, al margen de la lealtad del ejército se financia la formación de milicias que portan armas y gozan de la inmunidad que les otorga el estado a cambio del papel de cercar ciudades, amenazar ciudadanos y la gran pregunta que salta es: ¿esta es la democracia que se exporta? http://www.elmundo.com.bo/Editorialnew.asp?edicion=01/10/2008

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